EL ENCANTO DEL CERRO AZUL
Cuentan mis tíos que fueron al cerro azul a huaquear por lo que tuvieron que
pasar la noche en ese lugar; ellos querían saber si era cierto lo de la leyenda
que todos contaban, ellos salieron desde la mañana, cuando llegaron vieron que había ya en ese lugar algunas personas que al
parecer hacían lo mismo que ellos. El día se pasó muy rápido, ya por la tarde
empezaron a armar sus carpas y una fogata para así pasar la noche. Ya en la
noche todos se fueron a dormir, el ambiente se puso muy oscuro y tenebroso.
Entonces empezaron a
escucharse ruidos casi terroríficos, todos los ahí presentes se asustaron
mucho, decidieron salir de sus carpas y quedarse conversando para que les pase
el miedo, de pronto entre la oscuridad de la madrugada apareció un campesino,
se les acercó y les preguntó que hacían ahí, ellos le respondieron que
visitaban el cerro azul porque querían saber si era cierto lo de la leyenda que
los pobladores contaban.
El campesino les contó que
en la cima del cerro había una silla que era del diablo y que por eso el cerro
estaba maldito, y que no deberían acercarse a ese lugar porque si no jamás
regresaban, además ahí habitan seres malditos.
Mientras escuchaban al hombre, que había aparecido de la nada, escucharon unos
pasos como de caballo, ellos trataron de mirar en el entre el espesor de la
oscuridad y vieron un unicornio que tenía un solo ojo y un cuerno que
resplandecía. Se Asustaron mucho, y cuando regresaron a ver al hombre que les
estaba narrando la historia pues simplemente
ya no estaba.
Cuentan mis tíos que se
quedaron muy sorprendidos y que solo rezaban para que la mañana llegue pronto,
al día siguiente partieron para regresar a casa, al llegar tuvieron mucho que
contar.
Fiestas Yamunaqué Bryan Junior, estudia en I.E E “Juan Pablo II”
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